miércoles, 30 de julio de 2008

on an island in the Sun


¿A qué te aferras?

Nosotros los humanos hemos hecho de todo para lograr nuestra "vida de concreto", el objetivo principal de esto es eliminar la incertidumbre de una vida nómada, y prevenir que nos afecten mil y un cosas que el medio ambiente tiene para nosotros (lluvia, frío, calor, polvo, humedad) todo para que vivamos, la mayoría del tiempo, comodamente.

Por supuesto, dada la naturaleza del ser humano, ni siquiera en nuestras grandes guaridas de cemento y asfalto estamos seguros, y los culpables de esto somos nosotros mismos.

¿qué te garantiza que al final del día seguirás vivo? ¿una ley escrita en un libro que lleva por título "consititución"? lo dudo ¿hombres uniformados, armados, "que tabajan por tu seguridad"? tampoco lo creo.

Nuestra ciencia y tecnología nos proveen un sinfin de "seguridades" y soluciones, que intentan dar esa garantía de que tu vida será preservada mediante bolsas de aire, desinfectantes, medicinas, etc., aunque esta ciencia tiene también un rostro horrendo que le gana por mucho a las aplicaciones "humanas" del conocimiento: armas destructivas, venenos, viruses letales, y otras tantas formas de terminar con la vida en el planeta.

Así que ¿Qué es lo que realmente nos tranquiliza? Puedes aferrarte a objetos materiales, pero éstos pueden ser robados o destruidos. Todo lo que se forma eventualmente acaba por ser devuelto a un estado deshecho. Incluso nosotros.

Puedes aferrarte al futuro, pero el futuro es muy incierto. Ni con toda nuestra ciencia sabemos que nos depara, ¿o por qué crees que existen cosas como la Probabilidad? ¿la Estadística? son como un sustituto que intenta calmarnos con algun resultado, pero nada de esto es algo sólido, sino sólo predicciones modernizadas y bien estudiadas.

El presente no es más que un fogonazo que se extingue sin que siquiera acabemos de disfrutarlo. Apenas una chispa que conecta pasado y futuro.

Y el pasado ya ha sido así que ¿realmente puedes aferrarte a él? Lo único verdadero que nos ha dejado son nuestros recuerdos, y éso es lo único que ninguna otra persona puede "robarte" (tal vez puedan privarte de ellos lastimándote físicamente, pero jamas "poseerlos" de la misma manera en que tú los tienes)

Tus recuerdos, tu identidad, son lo único que te quedará después de que te hayan quitado todo.

Y puede que no sean verdades absolutas, pero al menos sabes que lo que está en tu mente está realmente allí y eso es algo que no fallará... a menos claro, que seas de las desafortunadas personas que, por alguna enfermedad, ni siquiera eso tienen. Perder posesiones (un reloj, dinero, un auto) son cosas que a fin de cuentas eran inciertas, simple materia transformada de un estado a otro por las razones que sean, pero perder tu memoria es perderte a tí mismo, es perder algo que nadie logrará recrear por más que lo intenten.

Y no tener identidad es lo que te convierte en un organismo inútil: un cuerpo extraño que requiere comer, dormir, defecar, pero que posee nada realmente, aún cuando esté vestido, alojado o acompañado, sin memoria, sin significado que asignar a todas esas cosas, los objetos, por sí mismos, no valen nada.

¿Mi consejo? No te aferres. Ni a objetos ni a personas, pues estos pueden desvanecerse de un momento a otro. Haz lo que puedas con lo que tienes y exprime cada momento, pues tu vida también puede terminar de súbito y creéme, no avisa.

Respeta los derechos de los demás,
trata de hacer siempre lo mejor para tí y para los demás, a cambio recibirás felicidad (en el peor de los casos, sólo recibirás una conciencia tranquila y tendrás certeza de haber jugado de acuerdo a las reglas del juego) y respeta tu planeta (pues él te da la vida).


"I'm dreamin' in the evening... I'm dreamin' all thru the day..."

EDITADO A RAÍZ DEL COMENTARIO DE PIMIENTO ROCKERO (era sólo una respuesta, pero acabó complementando la entrada original, thanx pepper!):

ah bueno, actividades como ahorrar para un viaje o simplemente no gastar todo tu dinero en el mismo momento en que te lo dan no es lo que llamaría aferrarse a algo, ser previsivo es un tipo de sabiduría.
Son actividades comparables a construir una casa: se hace poco a poco pero el resultado es gratificante. Lo que sería incorrecto a mi parecer sería frustrarse si las cosas no salen como planeabas.

Desprecio tanto la idea de aferrarse a alguna cosa pues si ésta cosa llegara a faltar o a desaparecer o a nunca llegar ¿qué harás? Algunas personas logran levantarse, pero muchas otras se estancan en un mismo momento de sus vidas.
Y dejan de crecer y dejan de hacer y dejan de actuar, condenados a vivir en la monotonía de su prisión hasta que la desesperación o el mismo tiempo los mate.

Abatidos, ellos mismos se privan de felicidad y buenos momentos, y sólo suspiran por aquella vida que no tuvieron (sin hacer algo al respecto) y se dedican a intentar vivir el sueño de otras personas, abandonando su identidad (hacen todo lo que la televisión o los medios les dicen que hagan, con la eterna promesa de una felicidad basada en objetos materiales). Éste es un gran negocio del mundo. Y un gran mal, por qué no.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me parece muy interesante lo que dices sobre el pasado, presente y futuro, es decir.....como disfrutar el presente, que dura tan solo un instante?....

Tienes razón.....aferrarse es malo y decadente, aunque haya cosas en que valga la pena aferrarse, como ahorrar para un viaje que quieres hacer aunque sepas que te tardarás años en juntar, no rendirte aunque todo se vuelva polvo y nubes negras por que eso tendrá una recompensa, creo que aquí lo dificil en verdad es distinguir entre lo que vale la pena y lo que no vale la pena para aferrarse.
Yo me he aferrado a ser feliz, a como dé lugar, con el que desee compartirlo y con el que no, con quienes me aman y me odian. Esa es mi aferración y vale la pena.

aplauso!

dijo...

Excelente artículo, mi buen. Me haces pensar. Y, aún cuando todo esto es demás sabido, siempre es bueno rectificarlo, escucha runa segunda opinion, saber que uno no esta loco (o si, ¡qué va!, espues de todo la locura es lo poco que nos queda de individualidad). Finalmente tienes razón en lo que dices, más todo aquello que tiene la vida de prescindible se vuelve indispensable al momento de poseerlo. Es la escasez, y el dolor que conlleva (despues de acostumbrarse a una vida tan vana y materialista), lo que hace a uno libre, libre de sentir y saber, una libertad que muchos anhelamos alcanzar algún día. Bonitas palabras mi amigo.